Terror en Paseos Nikte: Vecino provoca incendio tras una pelea en Cancún
El incidente ocurrió la noche del 20 de enero, cuando vecinos escucharon gritos y amenazas provenientes de uno de los edificios.
Un violento enfrentamiento entre vecinos del fraccionamiento Paseos Nikte, en la Supermanzana 256 de Cancún, terminó en un incendio provocado que puso en peligro la vida de una familia. El altercado, aparentemente originado por desechos de perro, se intensificó hasta convertirse en un acto de venganza que alarmó a toda la comunidad.
Los hechos que conmocionaron a la colonia
El incidente ocurrió la noche del 20 de enero, cuando vecinos escucharon gritos y amenazas provenientes de uno de los edificios. Según un video difundido en redes sociales, un hombre enfurecido insultaba a los ocupantes de un departamento de planta baja, lanzando amenazas de «dar machetazos» al padre de familia.
Minutos después, el agresor sorprendió a todos al arrojar un objeto dentro de la vivienda, seguido por un repentino estallido de llamas que consumieron rápidamente el departamento. Las imágenes muestran cómo el sujeto huyó hacia un parque cercano, mientras otro individuo, presuntamente su cómplice, abandonaba el lugar en una motocicleta.
Vecinos héroes controlan el incendio
Ante la emergencia, los vecinos de la zona reaccionaron con rapidez, organizándose para sofocar las llamas. Armados con cubetas de agua, lograron controlar el fuego antes de que se propagara a otros departamentos. Este acto de solidaridad evitó una tragedia mayor, aunque el susto dejó a la comunidad consternada.
Motivo del conflicto y respuesta de las autoridades
De acuerdo con relatos vecinales, el conflicto habría iniciado horas antes cuando el agresor discutió con la familia afectada, exigiendo que recogieran los desechos fecales de su perro. Hasta el momento, no se ha confirmado si hay personas lesionadas, pero la policía y bomberos ya se encontraban en camino para atender la situación y recabar información sobre lo sucedido.
Llamado a la paz y convivencia vecinal
Este lamentable episodio pone en evidencia la importancia de la convivencia pacífica y la mediación de conflictos antes de que escalen a situaciones extremas.